Con el objetivo de frenar la creciente actividad criminal relacionada con los scooters eléctricos y las bicicletas eléctricas, la policía del Reino Unido está trabajando en el desarrollo de un dispositivo de pulso electromagnético (EMP, por sus siglas en inglés) que puede desactivar los motores eléctricos de estos vehículos. La creciente popularidad de las opciones de micro movilidad eléctrica ha brindado a las personas alternativas convenientes y respetuosas con el medio ambiente para transportarse. Sin embargo, esto también ha abierto puertas para los criminales debido a la velocidad, la accesibilidad y el funcionamiento casi silencioso de estos vehículos.
El Laboratorio de Ciencia y Tecnología de Defensa, en colaboración con el Consejo Nacional de Jefes de Policía, está desarrollando un dispositivo EMP portátil que puede colocarse en una mochila, similar a algo que se vería en la película «Los Cazafantasmas». Este dispositivo puede emitir un pulso electromagnético y interferir con el circuito de control de una bicicleta eléctrica o scooter eléctrico sospechoso, lo que resulta en la paralización de su motor eléctrico. El presidente del Consejo Nacional de Jefes de Policía, Gavin Stephens, ha mencionado que es posible que el dispositivo esté disponible en unos pocos meses.
Aunque la intención detrás de este desarrollo es ayudar a las fuerzas del orden a capturar a los delincuentes, existen preocupaciones sobre la efectividad del dispositivo. Si bien apagar el motor eléctrico puede disminuir la velocidad del sospechoso, es poco probable que detenga por completo su escape. Los delincuentes aún pueden pedalear manualmente o, potencialmente, desarrollar sistemas de bicicletas eléctricas reforzados que puedan resistir un ataque EMP.
Además, preocupa el daño colateral que este dispositivo podría causar. Dado que el dispositivo requiere una línea de visión clara hacia el objetivo, existe el riesgo de afectar inadvertidamente a otros dispositivos cercanos, como teléfonos inteligentes. Se espera que el dispositivo no cause daño a los seres humanos ni a otros dispositivos, pero no hay garantías.
A medida que la policía del Reino Unido continúa explorando soluciones tecnológicas para combatir los delitos relacionados con los scooters eléctricos, aún no se sabe qué tan efectivas serán estas medidas en la práctica. Si bien el desarrollo del dispositivo EMP muestra promesas, aún existen desafíos prácticos y posibles consecuencias no deseadas que deben abordarse.