Las bicicletas y scooters eléctricos se han vuelto cada vez más populares como una forma divertida y conveniente de transporte. Sin embargo, los recientes incidentes de incendios en las baterías han generado preocupación acerca de su seguridad. En junio de 2024, se produjo un devastador incendio en un edificio del campus gubernamental de Couer D’Alene, Idaho, en el que se perdieron vehículos y equipos valiosos.
El incendio, que destruyó por completo un edificio que albergaba el departamento de tecnología de la información de la Policía de Couer D’Alene, el control de animales y los vehículos de la policía, requirió el esfuerzo de 30 bomberos para extinguirlo. Afortunadamente, no se reportaron heridos. La causa del incendio era desconocida inicialmente, pero una investigación realizada por los Bomberos Estatales de Idaho proporcionó información crucial.
Los investigadores descubrieron que el incendio fue causado por una «falla catastrófica» en la batería de una bicicleta eléctrica recientemente adquirida por el Departamento de Policía. La bicicleta se había utilizado la tarde anterior y se estaba cargando siguiendo los protocolos adecuados. El análisis forense, que será realizado por la compañía de seguros de la ciudad, arrojará más luz sobre el incidente.
Este desafortunado incidente sirve como un recordatorio conmovedor de la importancia de practicar hábitos seguros de carga para bicicletas eléctricas, scooters y otros vehículos de movilidad eléctrica. Si bien estos vehículos ofrecen una gran comodidad y beneficios ambientales, las prácticas de carga inadecuadas pueden tener consecuencias graves.
Para garantizar la seguridad de su hogar, lugar de trabajo o escuela, es fundamental seguir las pautas del fabricante para cargar su bicicleta o scooter eléctrico. Conectar adecuadamente el vehículo, utilizar estaciones de carga compatibles e inspeccionar regularmente la batería en busca de signos de daño son pasos cruciales para prevenir accidentes.
Si bien incidentes como el de Couer D’Alene son relativamente raros, destacan la necesidad de estar atentos y practicar una carga responsable. Al priorizar la seguridad, podemos seguir disfrutando de los beneficios de la movilidad eléctrica sin temor a incendios involuntarios.