En un giro repentino de los acontecimientos, un pedicab eléctrico, comúnmente conocido como rickshaw, se incendió frente al emblemático Palacio de Buckingham. El incidente provocó pánico entre los espectadores y llevó a los bomberos a extinguir rápidamente las llamas. Imágenes y videos que circulan en las redes sociales capturaron la escena dramática, con humo espeso y espectadores preocupados.
Greg Double, un testigo que paseaba con su hija en el parque St James, describió el momento en que se encontró con el incendio. Relató que las llamas alcanzaron una altura de aproximadamente cuatro pies y emitieron ruidos distintivos de estallidos. A pesar de las especulaciones iniciales sobre terrorismo o protestas debido a la ubicación, Double creía que simplemente se trataba de una bicicleta en llamas.
La causa exacta del incendio y la explosión posterior sigue siendo incierta, pero la Policía Metropolitana ha declarado que no creen que haya sido intencional. El pedicab se incendió en Spur Road, lo que llevó a la clausura temporal de la carretera mientras la Brigada de Bomberos de Londres se ocupaba del incidente. Afortunadamente, no se reportaron heridos y el fuego fue rápidamente controlado.
Este incidente pone de manifiesto un problema más amplio que afecta a Londres: el creciente número de incidentes de incendio relacionados con bicicletas y scooters eléctricos. La Brigada de Bomberos de Londres ha advertido que estos medios de transporte pueden resultar «increíblemente peligrosos» si no se utilizan de manera segura. De hecho, ha habido un promedio de un incendio cada dos días involucrando bicicletas y scooters eléctricos en 2023. Trágicamente, tres personas han perdido la vida en tales incendios y aproximadamente 60 personas han resultado heridas.
Los peligros asociados con estos vehículos se derivan principalmente de los incendios de las baterías de litio, que pueden ser particularmente feroces. Los incendios generan un calor intenso, capaz de fundir el metal, y liberan vapores tóxicos que representan un riesgo significativo para la salud. La Brigada de Bomberos de Londres insta al público a mantenerse alejado de tales incidentes por su propia seguridad.
A medida que Londres lidia con la creciente popularidad de bicicletas y scooters eléctricos, se vuelve crucial que tanto las autoridades como los usuarios prioricen las medidas de seguridad. Regulaciones estrictas y campañas educativas podrían ayudar a mitigar el riesgo de que estos vehículos se conviertan en peligros de incendio. Londres debe abordar esta preocupación emergente de manera rápida antes de que ocurran más tragedias.
Este es un reporte en desarrollo y aún falta por conocer más detalles.